La cadena de reactividad
A medida que uno cultiva más y más de los niveles del strudel, ve todo el nivel de las relaciones interpersonales como un solo nivel. Cuando recién comencé a despertar, venía a casa a visitar a mi familia y mi padre me diría: “¿Tienes un empleo?”.
Él no me preguntaba si yo era Buda o si estaba iluminado. Yo me enojaba con él porque me había atrapado en un lugar donde hacía real el plano, y yo decía: “no puedo permanecer cerca de mi familia, ellos me derriban”. Más adelante, cuando venía a casa, más fortalecido en mi fe y conexiones internas, mi padre me hacía las mismas preguntas y yo, en la quietud de mi ser, apreciaba su preocupación y la perspectiva que él tenía del mundo sin ser reactivo, de tal modo que mi respuesta no era reactiva y respondía, en cambio, a la conexión más profunda que teníamos. Esto abría el diálogo de una nueva manera.
Depende de la persona más consciente en la situación el romper la cadena de reactividad.
Difícil no ser reactivo
Este es nuestro trabajo en el mundo. Todos estamos viviendo en redes increíblemente reactivas. Si presionas en contra de ella, ésta aún te tiene. El arte es estar en ellas, pero no ser reactivos a ellas. Puedes permanecer en un matrimonio donde tu pareja no está interesada en lo que tú valoras y comenzar a trabajar con ese vehículo para tu propio despertar, a través de cambiar tu conciencia de una mente que juzga a una que aprecia. Verás que ciertas relaciones tienen mucho poder simbólico para ti, es muy difícil para ti no ser reactivo.
Alguien que te resulta muy atractivo en lo sexual, o alguien que es muy poderoso, o alguien que tiene mucho dinero. O, si tienes miedo de envejecer, alguien que sea mayor. O si temes morir, alguien que esté muriendo. Si estás fuertemente identificado con tu cuerpo, alguien que tenga una deformidad.
Quiero que seas capaz de ver a las personas a tu alrededor como las enseñanzas que necesitas.
Karma yoga como una forma de trabajar la reactividad
Ayudar a mi padre a lo largo de los años finales de su vida se convirtió en una enseñanza increíble para mí. Pasé de justificar mucho lo buena persona que era por estar ayudando a mi padre, a comprender qué regalo tan increíble estaba yo recibiendo de él. Él había cambiado mis pañales y ahora yo estaba cambiando los de él. Él me alimentó y ahora yo le alimentaba. Y, dado que yo no tenía ningún sentimiento de antinaturalidad en ello, ambos atravesamos este proceso con gozo.
Es extraordinario estar con un ser humano y atravesar el cambio en las relaciones de poder; conocer a la persona detrás de eso y luego sólo ver estos cambios en la relación. El trabajo de cultivar estos muchos planos de conciencia significa que siempre estamos disponibles para otro ser humano, detrás de su historia.
Tú no exiges que renuncien a su historia, pero estás presente si desean hacerlo.
-Ram Dass
Translation by M. Elizabeth Paz